El relato oficial hace agua ante la realidad de la gestión. Crisis narrativa y ajuste. De la esperanza al desencanto en el alfabeto de las economías. Al cumplir sus primeros 100 días de gestión, Javier Milei se encuentra parado sobre un cable fino: pregona un proyecto liberalizador, pero ya le cuesta ocultar que este sólo regiría para una minoría privilegiada, mientras que para el resto quedaría una libertad vigilada y –vaya paradoja– eliminadora de derechos. Al final, la libertad se limita a empobrecerse en tiempo récord. Por Marcelo Falak Si el poder es la capacidad de un líder de inducir o, en un extremo, imponer pautas de comportamiento en una población, el poder democrático supedita esa influencia al uso de la palabra. Así, la política democrática es eminentemente narrativa y persuasión, por lo que resultará más o menos eficaz en la medida en que sea percibida en la base como adecuada o como desacoplada de los hechos. Algo de esto empezó a cambiar con el golpazo que sufrió el DN